El Hogar Como un Espacio Sagrado
La crisis del coronavirus y los posteriores cierres que se han producido en todo el mundo nos han obligado a todos a quedarnos en nuestros hogares para refugiarnos de la pandemia. Nunca ha sido tan importante la idea del hogar como refugio y santuario. ¿Cómo ha sido este tiempo para ti? ¿Te has subido por las paredes de frustración o has disfrutado una etapa de paz y quietud? ¿Dónde has disfrutado más del tiempo durante el confinamiento? ¿A qué zona has recurrido en tu casa para conseguir un poco de espacio personal? ¿Y qué tipo de actividades has estado haciendo para mantenerte feliz y relajado?
Me ha llamado mucho la atención que, en este tiempo, las dos cosas que se han convertido en actividades universales sean hacer pan y todo tipo de pastelería en el horno y cultivar plantas. ¿Qué tienen estas dos actividades que nos trae tanta paz? Si tienes la suerte de tener espacio exterior, estar en el jardín o empezar un huerto urbano, estas han sido grandes maneras de estar al aire libre y conectar con la naturaleza. Incluso los que viven en pisos se han apuntado con macetas en los alféizares de las ventanas y en las cocinas. Es relajante y satisfactorio, pero también es una actividad que te aleja de la desgarradora situación que se desarrolla en el mundo exterior. Hacer pan y bollos también es un tipo de meditación. Amasar es maravillosamente relajante. El olor que sale del horno es como una voz interior que te recuerda "¡ya estoy en casa!".
Mis propios esfuerzos han tenido resultados mixtos. Mis galletas son peligrosamente buenas, pero cualquier intento de hacer pan o bollos lleva a resultados decepcionantes. La levadura y yo no nos llevamos bien. Lo mismo ocurre con las plantas, que tampoco han sido un completo éxito. Los tomates e hierbas más resistentes van muy bien, mientras que las más delicadas, como el cilantro y el cebollino, no tanto. En cualquier caso, han sido actividades maravillosas para compartir con mi hijo y una forma saludable de pasar el tiempo.
Acababa de mudarme, literalmente, justo antes de que el Coronavirus llegara, así que también he estado trabajando duro para hacer de la casa un hogar. ¿Cómo se hace eso exactamente? Para mí es una parte tan importante de lo que soy que me cuesta explicarlo. Es una alquimia de todos los ingredientes que me hacen ser quien soy, mezclados con mi experiencia en diseño de interiores. Uno de los espacios que aún estoy terminando está dedicado al yoga y al bienestar. También tengo allí mis libros, y es un espacio privado no relacionado con el trabajo o la familia. Es un espacio sólo para mí, para el autocuidado, el ejercicio, la meditación y la desconexión.
Todo esto me hizo pensar en la conexión entre nuestros hogares y nuestro bienestar. El diseño interior no es algo frívolo, no esencial. Un espacio bien diseñado puede hacernos sentir diferentes, mejores, más felices y más conectados con lo que somos. Un hogar bien diseñado puede crear una vida familiar más feliz. Creo en ello profundamente, y fue este convencimiento lo que me motivó a convertirme en diseñadora de interiores.
Así que esta semana os dejo entrar en mi propia casa y en un espacio que he creado recientemente con nuestra colección Granada. Está lleno de motivos bellos y elementos naturales que me recuerdan a una de mis ciudades favoritas. El diseño tiene el poder de hacerte sentir más relajado o de transportarte a otro lugar. Debe incorporar todos los elementos, desde los más obvios, como la iluminación y el mobiliario, hasta los menos obvios, como los olores y los sonidos.
En primer lugar, debemos preguntarnos cuáles son las actividades que nos hacen sentir más en paz, más nosotros mismos, y luego crear un hermoso espacio dedicado a ello. De ahí que, en mi caso, creara un espacio para el yoga, mis libros, y un lugar para exhibir objetos que tienen un valor sentimental para mí, que me recuerdan momentos, personas y lugares especiales. Para ti puede que sea la cocina, la jardinería, el arte, leer, escuchar música… lo que sea que te traiga alegría.
Y creo que una parte inherente de este proceso es darnos permiso para crear un espacio que nos apoye personalmente como personas. Hemos sido condicionados a pensar que esto es ser egoísta o indulgente, pero no lo es. ¿Cómo puedes dar lo mejor de ti a los demás si no estás en tu mejor momento? Cuidar de nosotros mismos para ser felices y estar sanos tiene claras repercusiones positivas en nuestro entorno.
Y un espacio "sagrado" puede ser más figurativo que literal. Puedes crear momentos sagrados en tu día como ayuda para relajarte y volver a encontrarte contigo mismo. Eso lo puede conseguir un buen tazón de desayuno para empezar bien el día, o acurrucarse en un sillón favorito para leer. Para mí, un baño caliente con velas y aceites esenciales es mi momento "sagrado"; todos los dolores y tensiones se disuelven así al final del día.
Pero creo que siempre hay cinco elementos esenciales para crear un espacio en tu casa que sea calmante y reconfortante:
Aroma
Utiliza sprays para habitaciones, velas aromáticas, difusores y flores frescas para llenar tus espacios con aromas que te gusten, que te evoquen recuerdos felices y que te relajen.
Plantas o flores
Tener flores frescas cortadas y plantas reales crea esa importante conexión con la naturaleza que todos anhelamos a nivel subconsciente. Las plantas también limpian el aire de tu casa.
Artículos personales
Coloca fotos de momentos y personas que te traigan alegría, una piedra recogida en un paseo especial o una obra de arte que te guste. Estos artículos cuentan la historia de quién eres y te conectan de nuevo contigo mismo.
Motivos, colores y materiales naturales
Dondequiera que vivas, aunque sea en un apartamento en medio de la ciudad, puedes llevar la naturaleza a tu casa eligiendo muebles de materiales y tejidos naturales, o incluso usando obras de arte con imágenes de la naturaleza.
Luz
Crear la luz adecuada en tu espacio es crucial, ya sea con velas, una lámpara que crea hermosos patrones de luz y sombra o ajustando la luz natural en tu casa con visillos.¡Me encantaría ver tus espacios sagrados! Sube una foto a Instagram con el hashtag #nomadestilosacred y elegiremos al ganador en la fecha del 22 de mayo de 2020, que recibirá un regalo para hacer su espacio "sagrado" aún más especial.